Tengo miedo a la muerte, no tengo miedo de decirlo

El día de ayer, sucedió un evento catastrófico, que conmovió a todo el mundo, no solamente al mundo deportivo. Como ya casi toda la mayoría conoce, se estrelló un avión donde estaban jugadores de un equipo de fútbol brasileño, que se disponían ir a jugar la final de la copa sudamericana a Medellín.

El despertar con esa noticia, causó múltiples reacciones, la primera que me causó, fue de mucho dolor por los familiares y amigos que este trágico momento dejaba. Luego a medida que pasaba el día, me comenzó a entrar un miedo profundo, e intente diseñar ese momento, con los jugadores y demás personas que estaban ahí. El miedo y el pánico me invadieron.

¿Qué harías si supieras que estás a microsegundos de morir? Alguna vez escribí un artículo, que destaca que tenemos que hacer caso, hagamos caso. Dicen que las reacciones de muchos jugadores en ese momento fueron de desesperación, según uno de los técnicos del avión. Este comentó, que les habían indicado que tenían que ponerse en posición fetal, apretando una mochila contra el pecho, o las piernas, solo los sobrevivientes hicieron eso.

Pero no sabemos cómo cada de uno de nosotros va a reaccionar. Si alguna vez viajaste en avión, sabes la sensación de tener que soportar una turbulencia ¡Qué miedo! ¡Que terror! Pánico entra en mí, hasta las lágrimas se me salen. Me da mucha desesperación pensar, que en cuestión de segundos ya no puedo estar, y sé que para perder esta ansiedad, debo de volver a mi inocencia, inocencia que perdí muchos años atrás.

Momentos de agradecimiento vive mi alma, por darme cuenta de que sigo vivo, de que tengo el milagro de poder caminar y ver. Dicen que el primer paso para el progreso, es estar agradecido con lo que se tiene, para estar preparados, para lo hermoso que se viene, para ti y para mí.