Errar es parte de evolucionar

El estar distraído te impide tener pensamientos claros, profundos, la mayoría llegan a ser totalmente superficiales y en esa superficialidad está la condena de tu constante represalia hacia ti mismo. Esta el lado opuesto, ese lado tranquilo, en el cual te encuentras caminando solo sin distracciones, apenas esta esa persona que pasa a tu lado trotando, que ni te llama la atención, logras percibir el aroma de las hojas, la luna que te quita una sonrisa, aquel árbol que cada día crece más, miras como los animalitos del piso corren, unos para protegerse, otros para comer. Es en ese momento que caes en cuenta de algo que no habías descubierto en todos esos años de condena, mis errores son indicadores de quien soy el día de hoy.

Entrar al quien soy, es quizás un tópico muy extenso, pero entrar al porque soy yo en la actualidad, logra ser más sencillo de visualizar. Hay momentos en los cuales el sol se autoflagela por emitir mucho calor, pero no se percata que gracias a esa luz poderosa, tenemos vida en la tierra. De igual forma, hay momentos en los cuales tu y yo nos reprochamos por haber hecho tal cosa, sin darme cuenta que todos esos momentos han pasado para que el día de hoy sea un ser humano mejor, lleno de luz.

Nuestro error más grande sería en el caso de que no nos demos cuenta lo que sucede y pasemos la vida sin darme cuenta que tengo tantos años para equivocarme y otros tantos para poder empezar a vivir con ese aprendizaje. No importa la edad en que te hayas dado cuenda de eso, lo importante es darse cuenta, es parte de la evolución.