La gran nostalgia

El proceder de acuerdo a la verdad, concuerda con las ganas de un niño de cumplir todos sus deseos, es decir no siempre queremos hacerlo así. El actuar desmedidamente, sin recaudo alguno, nos trae consecuencias a futuro, no siempre positivas.

Constantemente debemos de estar atento a cada situación que se nos presente. Es menester actuar según nuestros principios y jamás violarlos. Pero más importante aun es estar en la capacidad de receptar cualquier reclamo al cuerpo y mente que de fuera vengan.

Nuestra evolución está ligada al cambio de la vivencia diaria y lo aprendido Basados en esto, es casi una obligación cuidarnos con detalle, de lo que vemos y lo que escuchamos. Todo lo que viene de afuera se puede convertir en los principios que después cumpliremos sin medida alguna.

La teoría está creada para determinar una acción. Si me conozco, tengo la capacidad de no llegar al egoísmo y actuar para los que me rodean y los que me van a rodear. Es de eterna satisfacción poder mirar al cielo, elevar las dos manos y agradecer a quien tu creas necesario por haber actuado bien. La nostalgia que corre por alma en el momento que te sientas a descansar, no tiene precio.